La sociedad resulta a veces incomprensible. Hemos pasado en nuestra niñez, de jugar en la calle, salir al campo, irnos con la bicicleta a comer el bocata de media tarde… a que hoy muchos niños pasen sus tardes en casa «divirtiendose», encerrados, jugando con videojuegos, consolas, tablets… Y estos son los que están robando la niñez a nuestros chicos para convertirlos en espectadores de una diversión virtual.
El regalo diferente de hoy es un canto a aquellos días de nuestra niñez en que el profesor en clase nos mandaba hacer un herbario. Y es que en clase de ciencias naturales era casi, casi obligatorio hacer un pequeño herbario. Y sí, ya se que hoy eso puede no parecerles divertido a muchos chicos, pero te aseguro que lo es y mucho. La naturaleza es divertida, ¿por qué no jugar con ella? ¿por que no darle la importancia que tiene y pasar mas tiempo en ella? Tiene tanto que enseñarles.
Hacer un herbario tiene su importancia puesto que es la mejor manera para aprender a reconocer las plantas de nuestro entorno y de disfrutar conociendo un hábitat diferente al que la mayoría de los chicos no están acostumbrados.
Pero vamos a empezar por el principio ¿qué es un herbario? pues ni mas ni menos que una colección de plantas que previamente hemos salido a recoger al campo y que posteriormente hemos secado en una prensa. Es divertido de principio a fin porque primero tenemos que salir al campo a seleccionarlas y recogerlas, después tenemos que prensarlas y por último identificarlas.
Así que me puse manos a la obra para diseñar una prensa de plantas que iba a ser el regalo de cumpleaños para Jorge. Jorge tiene 8 años y quiere ser agente forestal cuando sea mayor. Le encanta observar las lagartijas, escalar con Lucas rocas y árboles y todo lo que este relacionado con el campo, la montaña y la aventura.
El resultado es esta prensa hecha de madera que se cierra con cuatro tornillos con palometas, que son las que al apretarlas hacen la presión para que las plantas se prensen de forma correcta. Esta pintada a mano y barnizada posteriormente, para que aguante muchas, muchas horas de campo. La prensa lleva en su interior un número de cartones para poder prensar las plantas correctamente y que absorban fácilmente la humedad que éstas pudieran tener. Cada prensa de las que hago esta personificada con un dibujo diferente. En este caso tenía claro que a Jorge iba a pintarle una furgoneta, porque él es un aventurero.
La prensa es muy cómoda de transportar puesto que tiene un tamaño medio perfecto para que los niños puedan manejarla. Las medidas son 28×20 cm.
Yo, las hojas secas que me sobran también las utilizo para hacer manualidades, las pongo en cuadernos de viaje o en tarjetas de felicitación. Y quedan muy originales.
Prueba a hacer un herbario con tus hijos, se lo pasaran genial y es la mejor forma para que conozcan la naturaleza y aprendan a respetarla. Intenta seguir siempre los siguientes consejos:
- Solo recoge aquellas plantas que vayas a utilizar.
- Como al recoger las plantas éstas estarán húmedas, la mayoría de las veces, no te olvides de poner las plantas, para secarlas bien, entre dos cartones.
- Recuerda que tienes que ser paciente, han de pasar muchos días para que la hoja este totalmente seca.
- Cuando ya estén listas, pégalas en un herbario. Cada una debe ir en una hoja diferente de papel y no te olvides de anotar los datos mas importantes, como el nombre común de la planta, también el nombre científico, el sitio donde la hemos recolectado, la fecha, alguna curiosidad de la planta…
Si tenéis oportunidad no dejéis de visitar el Real Jardín Botánico de Madrid, con una increíble muestra de plantas vivas y una magnifica exposición de plantas secas. Un autentico tesoro en pleno centro de Madrid.
No te lo pienses mas y sal a recoger plantas. Pero por favor no te olvides de ser respetuoso con la naturaleza, ¡es muy importante!
¿Y tú, te atreves a hacer tu propio herbario?